El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo en una entrevista con NTV que Ankara indudablemente compraría un segundo lote de los sistemas de defensa aérea S-400 de Rusia. Alexander Mikheyev, director ejecutivo del vendedor estatal de armas de Rusia Rosoboronexport (parte de la corporación estatal Rostec), dijo en el marco del foro “Army 2021” a fines de agosto que se esperaba un contrato adicional firmado antes de fin de año para la entrega de los sistemas S-400 a Turquía, escribe Vedomosti.
Rusia y Turquía firmaron un acuerdo marco para la entrega de cuatro baterías S-400 por una suma de aproximadamente $ 2.5 mil millones en el 2017. La medida de Turquía provocó críticas y presión de Washington.
El director del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías, Ruslan Pukhov, cree que la situación en torno al segundo contrato sigue siendo impredecible debido a la personalidad del líder turco. Erdogan puede firmar un segundo e incluso un tercer contrato para comprar los sistemas S-400, pero también puede negarse a firmar cualquier cosa, ya que dependerá de lo que considere mejor para él y su política, señaló el experto. El líder turco busca aumentar su importancia a los ojos de la OTAN y Occidente, pero al mismo tiempo, está tratando de seguir una política exterior independiente, continuó Pukhov. Solo el tiempo dirá si sus esfuerzos por garantizar la independencia de la política exterior, en primer lugar, de Estados Unidos, tendrán éxito, señaló el comentarista.
Según el investigador del sector turco del Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias de Rusia, Amur Gadzhiyev, Occidente no podrá tomar represalias si Turquía compra los sistemas rusos. Las relaciones entre Ankara y Washington ya son tensas, con varias personas y agencias turcas bajo sanciones, y Turquía ha sido eliminada del programa del caza F-35. Según el experto, los países occidentales se han quedado sin formas de presionar a Erdogan incluso antes de que comprara el primer conjunto de regimiento S-400. Además, la administración turca ha logrado crear un mecanismo para contrarrestar la presión de Occidente, por lo que incluso si hay otra ola de sanciones, no afectará mucho a Turquía, señaló el analista.