El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó que el sistema de votación electrónica de la nación es vulnerable al fraude y ofreció adoptar recibos impresos. Sus afirmaciones están siendo investigadas por la Corte Suprema de Brasil, que, sin embargo, también está investigando al propio Bolsonaro, por difundir noticias falsas.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, dijo el sábado que ve tres opciones para su futuro, sugiriendo que será arrestado, asesinado o se convertirá en el próximo presidente de Brasil si gana las elecciones de 2022.
«Tengo tres alternativas para mi futuro: ser arrestado, asesinado o la victoria», dijo, hablando en una reunión de líderes religiosos evangélicos, y luego declaró que «ningún hombre en la Tierra me amenazará».
Sus comentarios se producen en medio de su cuestionamiento sobre la confiabilidad de los sistemas de votación electrónica en el país, y también amenaza con que, si pierde, no aceptaría los resultados de las próximas elecciones presidenciales programadas para el próximo año. Ofreció iniciar la adopción de papeletas impresas como alternativa.
🚨🚨Bolsonaro said today he sees only 3 options for his future:
1) Prison
2) “being killed”
3) “victory”He may realy believe these are the stakes. Explains why he is digging in so hard, as polls suggest he would lose in 2022 https://t.co/t9fP9fC8sH
— Brian Winter (@BrazilBrian) August 28, 2021
Las críticas de Bolsonaro al sistema de votación electrónica de la nación no fueron bien recibidas por el tribunal electoral brasileño, que señaló el miércoles que el sistema funciona con normalidad y describió las sugerencias del líder de adoptar boletas impresas como «un desperdicio de enfoque», lo que provocó una rápida ira del gobierno. presidente.
«Tenemos un presidente que ni desea ni provoca una ruptura, pero todo tiene un límite en la vida. No puedo seguir viviendo con esto», declaró Bolsonaro en la reunión de funcionarios religiosos.
En medio de sus ataques al sistema de votación electrónica, Bolsonaro también ha buscado enjuiciar al juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, una medida que solo puede ser impulsada por el presidente del Senado, actualmente Rodrigo Pacheco. Este último se ha negado a iniciar un proceso de acusación, subrayando la importancia de preservar «la división fundamental del poder, otorgar la independencia de cada uno y buscar la armonía entre ellos».