El Ministerio de Petróleo y Recursos Minerales de Siria atribuyó hoy la escasez de hidrocarburos a una verdadera guerra energética desatada por Estados Unidos y sus aliados en Occidente contra el país.
Debido al bloqueo, las sanciones económicas, la criminal “Ley César” y el deterioro de la situación económica en el vecino Líbano existen serias dificultades en la importación de gas y derivados del petróleo, reveló un directivo de esa cartera a la televisora nacional al-Khabar, en su comentario sobre la aguda escasez de gas doméstico.
Precisó que antes de la guerra Siria exportaba ese producto, pero los actos de sabotaje y la ocupación estadounidense de los campos gasíferos hicieron que la nación necesitara la importación de los dos tercios de sus necesidades.
Estados Unidos y sus aliados, en particular Israel, han ido más allá en su guerra económica contra Siria, al incrementar ataques en alta mar contra buques petroleros dirigidos a este país árabe, refieren reportes de prensa.
Según el primer ministro Hussein Arnous, los petroleros cargados de crudo con destino a Siria son atacados o interceptados en alta mar para agudizar la crisis de hidrocarburos, generada por las sanciones económicas y la ocupación de más del 90 por ciento del territorio donde están los pozos de petróleo.
Siria producía antes de la guerra, en 2011, más de 380 mil barriles diarios de crudo y debido a la ocupación y a los actos terroristas, esa cifra se redujo actualmente a solo 24 mil, mientras el país necesita diariamente más de 148 mil barriles.
Cifras recientes reveladas por las autoridades indican que sólo durante el segundo semestre de 2020, el país importó derivados del petróleo por un valor de 820 millones de dólares.
Prensa Latina