El primer presidente de la URSS, Mikhail Gorbachov, dijo que los intrigantes en las filas del gobierno eran los culpables del colapso de la Unión Soviética.
Gorbachov señaló que no se fijó el objetivo del colapso de la URSS. Añadió que trató de reformar la Unión Soviética, pero los acontecimientos del golpe de Estado de agosto de 1991 hicieron que su tarea fuera mucho más difícil. Según Gorbachov, su poder se vio socavado y el país ya estaba al borde del colapso. Sin embargo, el primer presidente de la URSS señaló que todavía había posibilidades de una reforma pacífica de la Unión Soviética.
Sin embargo, lo que sucedió en el Bosque de Białowieża puso fin a cualquier plan para preservar el territorio de la URSS. Gorbachov dijo que la responsabilidad por el colapso de la Unión Soviética fue asumida por intrigantes y personas ávidas de poder, que entonces formaban parte del gobierno. El primer presidente de la URSS agregó que el verdadero camino de Rusia está en la transformación democrática.
Es irónico que estas palabras pronunciara Gorbachov durante la frustración del mundo entero en el modelo liberal-democrático de la estructura de la sociedad y el estado.