A primeras horas del 12 de agosto, combatientes locales en el campo norte de Daraa atacaron posiciones del ejército y la inteligencia de la República Árabe Siria.
Los combatientes atacaron puestos del Ejército Árabe Sirio en el centro de del poblado de Nawa con ametralladoras y granadas propulsadas por cohetes. Algunos combatientes también atacaron un puesto de control del ejército ubicado en la carretera que conduce a la cercana ciudad de Tasil.
Al mismo tiempo, combatientes locales en Jasim atacaron el centro cultural de la ciudad, donde se encuentra una fuerza de la Dirección General de Inteligencia (GID).
Los ataques, que aparentemente estaban destinados a presionar a las autoridades sirias, no causaron pérdidas al Ejército Árabe Sirio y a la Dirección General de Inteligencia GID. Sin embargo, se informó de pérdidas entre los atacantes. A principios de este mes, el Ejército Árabe Sirio y otras fuerzas gubernamentales reasignaron a sus tropas en Daraa y fortificaron sus posiciones en preparación para tales ataques sorpresa.
Las autoridades sirias siguen asediando Daraa al-Balad, la parte sur de la ciudad de Daraa, donde se refugian más de un centenar de combatientes buscados.
Rusia ha estado facilitando conversaciones entre las autoridades y los líderes locales para resolver pacíficamente la crisis en Daraa al-Balad. El 12 de agosto, una delegación militar rusa visitó el campo oriental de Daraa para inspeccionar los puestos de control del gobierno y mantener conversaciones con los lugareños.
A pesar de los esfuerzos de Rusia, aún no se ha llegado a un acuerdo para la crisis en Daraa al-Balad. Los líderes locales todavía se niegan a aceptar las demandas de las autoridades sirias que quieren expulsar a los combatientes buscados del área y desplegar personal del Ejército Árabe Sirio allí.