Las autoridades bielorrusas no están en contra de la integración con Rusia, pero esto solo es posible si se preserva la condición de Estado y la soberanía de la República de Bielorrusia. La declaración correspondiente fue hecha por el líder bielorruso Alexander Lukashenko.
“Cuando hablamos de integración, debemos entender claramente: cualquier integración es sin pérdida de la condición de Estado y la soberanía”, dijo Lukashenko en una reunión con periodistas y representantes del público.
Al mismo tiempo, el presidente de Bielorrusia agregó que el gobierno de Minsk nunca se ha opuesto a la «alianza más estrecha» con Moscú.
Anteriormente, el primer ministro ruso, Mikhail Mishustin, mantuvo conversaciones telefónicas con su homólogo bielorruso, Roman Golovchenko. Durante la conversación, los políticos discutieron la integración de los dos países y las sanciones occidentales.