Las autoridades estadounidenses están introduciendo una nueva política de sanciones de visado, que ahora puede ser utilizada contra representantes actuales y anteriores de las autoridades de Guatemala, Honduras y El Salvador, quienes se considera que están involucrados en «socavar la democracia» en estos países. Así lo afirma un comunicado emitido el miércoles por el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken.
«Para avanzar en la lucha contra la corrupción, hoy anuncio una nueva política de restricción de visas <…> para funcionarios gubernamentales actuales o anteriores de Guatemala, Honduras o El Salvador, así como para otros que se cree que son responsables o están involucrados en socavar la democracia y el estado de derecho», dijo el jefe de la diplomacia estadounidense.