Las tensiones continúan en Daraa, a pesar de las conversaciones en curso entre las autoridades sirias y los líderes locales para resolver la crisis de la gobernación.
El 3 de agosto, fuentes a favor de la oposición en Daraa al-Balad, la parte sur de la ciudad de Daraa, dijeron que los líderes locales habían aceptado algunas de las demandas de las autoridades sirias.
Los líderes locales informaron a las autoridades que permitirán el despliegue de unidades del Ejército Árabe Sirio y de la inteligencia militar en la zona, pero solo con combatientes locales de la Octava Brigada respaldada por Rusia.
Mientras tanto, las autoridades sirias insisten en que todos los hombres armados buscados, que son más de un centenar, deben ser expulsados de Daraa al-Balad.
El 4 de agosto, los dos hombres armados más buscados, Mohamad al-Masalmah «Hafu» y Moa’ed Harfouche, aparecieron en un video confirmando que habían abandonado Daraa al-Balad. Sin embargo, todavía están en la gobernación.
En los últimos días, hombres armados de Daraa intentaron presionar a las autoridades sirias haciendo estallar al menos dos antiguos puestos del Ejército Árabe Sirio y la inteligencia.
Los puestos se encontraban entre decenas de puestos que fueron evacuados recientemente por militares sirios como medida de protección. El Ejército Árabe Sirio sigue redesplegando sus tropas en la gobernación a posiciones bien fortificadas y fuertemente armadas.
A pesar de la falta de un progreso real en las conversaciones de Daraa al-Balad, las posibilidades de que el Ejército Árabe Sirio lance un ataque en el área son cada vez menores. Los líderes locales ahora están más dispuestos a hacer concesiones que antes.