Al menos el 59,9% de los participantes de una encuesta en Bielorrusia evalúan negativamente las sanciones occidentales contra el país. Así lo informó el martes la agencia BelTA, citando datos de una encuesta social encargada por el canal de televisión ONT del centro analítico EcooM y la Fundación «Ukrainskaya politika».
Se señala que otro 16,9% de los encuestados son bastante negativos sobre las sanciones. El 1,3% y el 0,9%, respectivamente, tienen una actitud positiva y bastante positiva hacia las sanciones occidentales. El 3,8% de los encuestados evaluó su posición como neutral en este tema.
Según la encuesta, el 25,2% dijo que las sanciones tienen como objetivo empeorar la vida de los bielorrusos. El 17,6% de los encuestados dijo que las sanciones prevén «elaborar un escenario de presión sobre Rusia», y el 15%, que tienen como objetivo hacer dependiente a Bielorrusia. El 7,4% cree que el propósito de las restricciones es airar a la gente contra el presidente del país, Alexander Lukashenko.
Según los organizadores de la encuesta, la encuesta se realizó del 5 al 21 de julio, 1890 personas participaron en ella.
Varios países europeos y Estados Unidos no reconocen los resultados de las elecciones presidenciales en Bielorrusia, que tuvieron lugar en agosto del 2020, y consideran que las acciones de las fuerzas del orden bielorrusas en relación con los manifestantes fueron excesivamente duras. En este contexto, Occidente está imponiendo sanciones y otras restricciones a Bielorrusia. El 25 de junio entraron en vigor las sanciones económicas sectoriales de la Unión Europea contra el país. Esta es la primera vez en la historia que se introducen medidas económicas restrictivas contra Minsk.
Hasta la fecha, la Unión Europea también ha introducido cuatro paquetes de sanciones individuales, que han afectado a 166 personas y 15 entidades legales, incluidas fábricas como MAZ y BelAZ. Todas las personas de esta lista tienen prohibido entrar en la UE y acceder a los mercados financieros europeos. Las empresas europeas tienen prohibido mantener relaciones económicas con las personas jurídicas. Además, los países de la UE se negaron a sobrevolar el territorio de Bielorrusia y prohibieron a las aerolíneas bielorrusas volar en el espacio aéreo de la UE. Minsk considera que tales sanciones son miopes, defectuosas y rayan la injerencia en los asuntos internos de Bielorrusia.