El primer ministro israelí, Naftali Bennett, afirmó anteriormente que Tel Aviv tiene pruebas que demuestran que Teherán estaba detrás del ataque a un petrolero, Mercer Street, el 30 de julio frente a la isla omaní de Masirah.
Estados Unidos confía en que Irán estuvo detrás del ataque al petrolero Mercer Street frente a la costa de Omán el 30 de julio, declaró el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, citando «información disponible». Agregó que no podría haber justificación para este acto y prometió una «respuesta apropiada» por parte de Estados Unidos sin profundizar en detalles.
«Tras la revisión de la información disponible, estamos seguros de que Irán llevó a cabo este ataque, que mató a dos personas inocentes, utilizando UAV explosivos unidireccionales, una capacidad letal que se emplea cada vez más en toda la región», dijo Blinken.
La declaración sigue a que el Reino Unido e Israel acusan a Teherán de lanzar un ataque contra el petrolero, matando a dos de su tripulación, un ciudadano británico y un ciudadano rumano, en el proceso. El secretario de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab, calificó el incidente de «ataque ilegal e insensible», y agregó que el Reino Unido y sus aliados están planeando una respuesta coordinada al ataque al petrolero.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, pidió anteriormente a la comunidad internacional que respondiera a lo que, según él, fue un ataque iraní contra el petrolero, que es propiedad de una empresa británica.
«Esperamos que la comunidad internacional le aclare al régimen iraní que ha cometido un grave error. En cualquier caso, sabemos cómo enviar un mensaje a Irán a nuestra manera», dijo el primer ministro israelí.
Irán rechazó enérgicamente las acusaciones, calificándolas de «infundadas». Además, cuestionó la credibilidad de las declaraciones israelíes con respecto al ataque y enfatizó que «dondequiera que este régimen haya ido, se ha llevado la inestabilidad, el terror y la violencia».
Ataque al petrolero
El petrolero MV Mercer Street es operado por Zodiac Maritime, con sede en el Reino Unido, que a su vez forma parte del Grupo Zodiac, propiedad del multimillonario israelí Eyal Ofer. El carguero pasaba por la isla omaní de Masirah el 30 de julio, cuando sufrió una explosión de origen desconocido que dejó un agujero en la parte superior del puente del petrolero.
. La explosión mató a dos miembros de la tripulación. El Comando Central de Estados Unidos alegó en un comunicado que se utilizó un dron explosivo unidireccional en el ataque al buque.
El portaaviones USS Ronald Reagan y el destructor de misiles guiados USS Mitscher posteriormente escoltaron al petrolero dañado al puerto seguro más cercano para su reparación. Según los informes, echó anclas cerca del puerto de Fujairah en los Emiratos Árabes Unidos.