A principios de este año, México aprobó varias vacunas COVID para uso de emergencia, incluida la rusa Sputnik V y las desarrolladas por Pfizer, AstraZeneca, Johnson & Johnson y Sinovac. Las personas menores de 18 años no están incluidas en el programa de vacunación del país.
La mayoría de los cibernautas han elogiado la reciente declaración del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador de que México no cedería a la presión de las firmas farmacéuticas para comprar vacunas COVID para niños, lo que sugiere, sin embargo, que podría enfrentar graves consecuencias por sus comentarios.
«Bien hecho México, te saludo, las grandes farmacéuticas son criminales y terroristas que creen que están por encima de la ley», afirmó este sábado un usuario de Twitter, aparentemente refiriéndose a los gigantes farmacéuticos Johnson & Johnson y Pfizer que suministran vacunas contra el coronavirus al país.
México también aprobó varias otras vacunas para uso de emergencia, entre ellas la rusa Sputnik V y las fabricadas por AstraZeneca y Sinovac.
https://twitter.com/GillianMcKeith/status/1421366469095563265?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1421366469095563265%7Ctwgr%5E%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fsputniknews.com%2Fviral%2F202107311083498377-mexican-president-hailed-online-as-he-accuses-big-pharma-of-trying-to-profit-from-vaxxes-for-kids%2F
Muchos cibernautas no se andaban con rodeos al advertir que la vida de Obrador ya está en peligro porque estaba «diciendo la verdad».
«Un presidente más que ahora tiene un objetivo en la espalda. Todos sabemos quién puede apretar el gatillo», escribió un internauta, mientras que otro argumentó que la situación «parece que otro presidente está a punto de sufrir un ‘infarto’ o ‘morir’ de COVID ‘».
Las declaraciones siguen al presidente mexicano diciendo que su gobierno aún estaba esperando que la comunidad científica revelara los beneficios de vacunar a los menores.
Obrador anunció que México no compraría inyecciones para niños hasta que se proporcionara evidencia concluyente, ya que acusó a los gigantes farmacéuticos de concentrarse en obtener enormes ganancias de las ventas de vacunas COVID-19.
“México no será rehén de las empresas farmacéuticas que solo quieren hacer negocios y asustar a los niños con la idea de que es necesario vacunar contra el COVID-19”, dijo.
A principios de este mes, el Ministerio de Salud de la nación declaró que un mínimo del 48% de los mexicanos ya había recibido al menos una dosis de vacuna. El programa de vacunación de México estipula dar prioridad a los grupos de alto riesgo, excluyendo de la campaña de vacunación a los menores de 18 años.