La Comisión Constitucional de Bielorrusia presentó el miércoles un proyecto final sobre enmiendas a la base legal del país. Según su presidente y jefe del Tribunal Constitucional, Pyotr Miklashevich, el texto de este documento ha sido acordado y se presentará al presidente Alexander Lukashenko el 22 de julio. La nueva Constitución propuesta se someterá a un referéndum nacional, que se espera que se llevará a cabo a principios del 2022, escribe Vedomosti.
Las enmiendas afectarán a los poderes del presidente y del parlamento. El presidente no podrá servir por más de dos mandatos (no se menciona si son consecutivos). Actualmente, según la ley bielorrusa, el mandato del presidente es ilimitado. Lukashenko fue elegido para su cargo en 2018 y, en teoría, podría gobernar hasta el 2033. Bielorrusia también planea aumentar la edad mínima para los candidatos presidenciales de 35 a 40 años. Los aspirantes a la presidencia no deben tener ciudadanía extranjera y deben vivir en el país durante al menos 20 años antes de las elecciones.
El borrador de la Constitución no ofrece claridad sobre el futuro de Lukashenko y le da rienda suelta, dijo Valery Karbalevich, experto de la estrategia del grupo de expertos bielorrusos. Lukashenko podría postularse para un nuevo mandato y también crear otro puesto para él. Según el politólogo Andrei Suzdaltsev, la nueva Constitución no menciona el futuro político de Lukashenko porque ya está decidido. Lukashenko no participará en las próximas elecciones presidenciales, teniendo en cuenta las protestas del 2020. Lukashenko podría presidir la Asamblea Popular de Bielorrusia, un organismo que obtendrá grandes poderes, durante toda su vida. Bajo este sistema, el presidente cumplirá supuestamente las funciones de un gerente clave, mientras que el presidente de la Asamblea asumirá prácticamente los poderes de un monarca, señaló el experto.