Las autoridades chinas han exigido que Estados Unidos detenga cualquier intento de organizar una revolución de «colores» en Siria.
Así lo informó el South China Morning Post, citando al ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi.
Según él, es perjudicial obligar a otros países a cambiar de régimen, y la propia práctica de «pisotear la soberanía en nombre de las transformaciones democráticas es impopular».
Además, Wang Yi exigió que Estados Unidos y los países occidentales levanten todas las sanciones contra el país para abrir canales de ayuda humanitaria.
Añadió que mientras el pueblo sirio está sufriendo la crisis económica provocada por las sanciones, «algunos países hablan de la protección de los derechos humanos en Siria, mostrando sólo hipocresía».