Se completó el tendido de 100 km de la sección costa afuera del gasoducto “Baltic Pipe”, dijo el portavoz del gobierno para la infraestructura energética estratégica Piotr Naimski.
Naimski dijo en la radio polaca que «dos de los tres buques están trabajando actualmente en el Báltico, que están colocando la sección costa afuera», «ya se han tendido en el fondo unos 100 km del “Baltic Pipe” con una longitud total de unos 295 km.”. Aseguró que «todo marcha según lo previsto», informa TASS.
Según Naimski, Dinamarca ha resuelto los problemas que surgieron anteriormente con la protección del medio ambiente. “Se llegó a un acuerdo y se reanudó el trabajo”, agregó.
El 30 de abril del 2021, el presidente polaco, Andrzej Duda, anunció oficialmente el inicio de la construcción del “Baltic Pipe”, un proyecto de gasoducto que se supone conectará los campos de la plataforma noruega en el Mar del Norte con Polonia a través de Dinamarca.
El proyecto contempla la interconexión de los sistemas de transmisión de gas noruegos y daneses, la ampliación de la infraestructura de Dinamarca y Polonia, así como la construcción de una tubería que conectará los dos países a lo largo del fondo del Mar Báltico. La capacidad prevista es de 10 mil millones de metros cúbicos por año. Las autoridades polacas han planeado completar la construcción antes del 1 de octubre del 2022.
El operador de la red de gasoductos polaca “Gaz-System” está construyendo un gasoducto junto con el operador danés del sistema de transporte “Energinet”; este último, a su vez, construirá una estación compresora de gas en “Everdrup”, ampliará el sistema de transporte interno y lo conectará al gasoducto “Europipe II”, que corre a lo largo del fondo del Mar del Norte.
“Gaz-System” es responsable de la construcción de un gasoducto en alta mar bajo el Mar Báltico, que conecta las costas de Dinamarca y Polonia, así como del desarrollo del sistema de transporte nacional.
Se cree que el “Baltic Pipe” debería convertirse en una alternativa al “Nord Stream 2”.
Sin embargo, en junio, la Junta de Apelaciones de Alimentos y Medio Ambiente de Dinamarca se negó a emitir un permiso para la construcción del “Baltic Pipe”.