Dos ciudadanos estadounidenses que fueron arrestados en Haití bajo sospecha de estar involucrados en el asesinato del presidente Jovenel Moise dijeron que se suponía que no debía ser eliminado, dijo el juez de paz Clement Noel.
«Dijeron que eran traductores. El objetivo de los mercenarios era arrestar al presidente Moise bajo la orden de un juez de instrucción y no matarlo», dijo Noel al diario Nouvelliste, citando los testimonios del sospechoso.
No se detalló la naturaleza precisa de la orden. El medio de comunicación dijo que Solages afirmó haberse enterado del trabajo en Internet y llegó a Haití hace un mes, mientras que los otros presuntos asesinos lo hicieron hace tres meses.
Los investigadores que registraron los vehículos de los sospechosos encontraron armas de fuego y dinero en efectivo estadounidense, incluido un servidor de una cámara de video que estaba instalada en la residencia de Moise, y la chequera de su esposa, dijo el funcionario.
Moise fue asesinado a tiros en su residencia privada el miércoles por la mañana y su esposa resultó herida en el ataque. Según los informes, la policía haitiana ha identificado a 28 presuntos asesinos, la mayoría de ellos ciudadanos colombianos. La policía haitiana detuvo a 17 sospechosos, incluidos dos ciudadanos estadounidenses nacidos en Haití, identificados como James Solages y Joseph Vincent.