A medida que las infecciones por Covid-19 de Corea del Sur rompen récords, vuelven a imponer reglas de máximo distanciamiento social


El gobierno de Corea del Sur ha implementado un duro semicierre para el área metropolitana de Seúl. El país se enfrenta a su cuarta ola de Covid-19, con las infecciones diarias aumentando a sus niveles más altos.

Las reglas de distanciamiento social de «Nivel 4», las más restrictivas según las pautas de salud pública de Corea del Sur, se anunciaron el viernes para Seúl y la vecina provincia de Gyeonggi e Incheon, densamente poblada. La decisión se tomó luego de una reunión de funcionarios de varias agencias gubernamentales presidida por el primer ministro Kim Boo-kyum, informó la agencia de noticias Yonhap.

Como tal, durante al menos dos semanas a partir del lunes, la mayoría de las reuniones públicas en el área de la capital de Seúl estarán prohibidas, mientras que los eventos privados estarán fuertemente restringidos. No habrá clases presenciales en las escuelas ni fiestas en clubes nocturnos. Los restaurantes tendrán que observar un toque de queda para cenar a partir de las 10 pm. Las bodas y funerales se limitarán solo a familiares.

«Las medidas antivirus han alcanzado su nivel máximo de crisis, con la renovación de nuevos casos diarios de Covid-19 récord durante varios días», dijo el primer ministro, explicando la decisión. El gobierno incluso ha suspendido las medidas de incentivo para las personas vacunadas, que actualmente tienen un margen extra en su vida diaria, mientras dure la crisis.

El semi-bloqueo se impuso en un intento de frenar las infecciones por Covid-19, que han aumentado significativamente desde que la variante contagiosa Delta del virus que causa la enfermedad llegó a Corea del Sur. Las nuevas infecciones diarias han batido récords nacionales durante tres días seguidos y ahora están en el nivel más alto desde que se identificó el primer caso de Covid-19 en enero del año pasado.

La Agencia de Prevención y Control de Enfermedades de Corea (KDCA) registró 1.316 nuevos casos el viernes, incluidas 1.236 infecciones locales. Alrededor del 80 por ciento de los pacientes procedían de Seúl y sus áreas vecinas.

De manera abrumadora, la enfermedad afecta a personas de entre 20 y 30 años, que aún no son elegibles para las vacunas. La KDCA dice que el 30,2% de la población del país ha recibido al menos una vacuna hasta ahora, con solo el 11% completamente vacunado.

El ministro de Salud, Kwon Deok-cheol, advirtió a los surcoreanos que la cuarta ola de Covid-19 que se está desarrollando puede durar un «período de tiempo considerable». En el peor de los casos, la KDCA espera que los casos diarios lleguen a 2140 en julio.

El primer ministro Kim ofreció una disculpa a los propietarios de pequeñas empresas, quienes sufrirán más económicamente por las restricciones. “Será difícil compensar por completo el daño, pero el gobierno hará todo lo posible para brindar el máximo apoyo a través de una ley de apoyo a las microempresas”, dijo.

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