La medida que prevé el uso obligatorio de máscaras en la calle estuvo vigente en el país durante aproximadamente un año.
Los residentes de España desde el sábado pueden salir a la calle sin máscaras. Esta decisión fue tomada por el gobierno del reino en relación con la mejora de la situación epidemiológica en el país y la tasa de vacunación de la población contra el nuevo coronavirus.
Según el decreto del Gabinete de Ministros, se cancela el uso obligatorio de máscaras protectoras en la calle, siempre que se observe una distancia de 1,5 metros. Esta regla no se aplica a los compañeros de habitación que no pueden mantener esta distancia. A pesar del debilitamiento del régimen, los españoles todavía tendrán que usar máscaras en todos los lugares públicos cerrados, así como en algunos casos durante los grandes eventos al aire libre. Además, las máscaras seguirán siendo obligatorias en el transporte público. La multa por infracción de las medidas puede ser de hasta 100 €.
Al mismo tiempo, la iniciativa del gobierno provocó polémica en la sociedad española. Según una encuesta de opinión pública publicada por el diario 20 Minutos , el 46% de los encuestados apoya la idea de acabar con el uso de máscaras en la calle. Al mismo tiempo, el 42,5% de los españoles considera esta decisión prematura y cree que el riesgo de contraer coronavirus sigue siendo alto.
Una medida que exigía el uso de máscaras en la calle estuvo en vigor en España durante aproximadamente un año.
Desde el inicio de la propagación del nuevo coronavirus en 47 millones de España se han detectado más de 3,77 millones de casos de contagio, han fallecido más de 80,7 mil pacientes. A fines de octubre del año pasado, el gobierno introdujo un régimen de alerta máxima en el país, que finalizó el 9 de mayo de este año. A mediados de junio, la incidencia del nuevo coronavirus en España cayó por debajo de los 100 casos por cada 100 mil habitantes por primera vez desde agosto del año pasado.
El 27 de diciembre de 2020 se inició una campaña de vacunación en el país. Hasta ahora, más de la mitad de los residentes en España han recibido al menos una dosis de la vacuna covid.