Venezuela denuncia una “campaña brutal contra Nicaragua solo por hacer justicia” en medio de críticas a Managua por el arresto de opositores en ese país.
En una cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), celebrada este jueves por videoconferencia, a propósito de la celebración de los 200 años de la batalla de Carabobo, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, rechazó la denuncia internacional contra la detención de varios opositores en Nicaragua, y subrayó su respaldo a su homólogo nicaragüense, Daniel Ortega.
“Una campaña brutal contra Nicaragua, solo por hacer justicia […] Toda la solidaridad con el pueblo sandinista, con el comandante Daniel Ortega y pa’lante con la democracia”, ha manifestado Maduro.
Para Maduro, los medios transnacionales y de la derecha atacan y posicionan matrices de opinión, “porque no soportan que le toquen ni el pétalo de una rosa a los príncipes dorados del intervencionismo”.
“Delinquen, conspiran, roban, violan constituciones, violan la ley, pero ellos son los príncipes herederos del poder imperial en los países de América Latina y del Caribe. Muy bien. Nicaragua con su verdad es como una espada que corta el tiempo”, ha recalcado.
Por cargos de haber recibido fondos del exterior, Nicaragua ha detenido a unos 19 opositores, que según denuncia Ortgea, son “criminales” agentes de EE.UU. para realizar un golpe de Estado en su país de cara a las elecciones Presidenciales previstas para el próximo noviembre.
Al refutar las críticas al respecto, Ortega recuerda que en EE.UU. y países de la Unión Europa (UE) hay presos políticos, pero Nicaragua no va a intervenir y no va a exigir la liberación de estos prisioneros, ha declarado.
El 9 de junio, EE.UU. impuso sanciones contra políticos de Nicaragua bajo el pretexto de apoyar la democracia y derechos humanos. Además, el 15 de junio, la Organización de Estados Americanos (OEA) emitió una resolución en la que condenó la detención de figuras opositores.
Nicaragua denuncia dichas medidas punitivas y posicionamientos hostiles, y asegura que los opositores detenidos están acusados de intentar socavar la independencia y soberanía del país, así como, recibir apoyo financiero de extranjero para injerir en los asuntos internos del Estado.
El Gobierno de Managua denuncia que Washington busca dictar medidas ilegales, arbitrarias, coercitivas y unilaterales contra ciudadanos nicaragüenses.