El jueves 24 de junio se reanudaron las audiencias en el caso del accidente del Boeing de Malasia en el vuelo MH17. La fiscalía dio motivos para afirmar que estaba llevando la investigación a un callejón sin salida.
La abogada Sabine ten Dusshate, que representa a uno de los acusados, dijo que el fiscal Theis Berger había tergiversado los hechos.
Este último manifestó que la empresa “Almaz-Antey” presuntamente decidió no entregar informes previamente elaborados, reemplazándolos por nuevos documentos.
Dusshate señaló que, en primer lugar, “Almaz-Antey” recibió una solicitud del juez de instrucción para estudiar y evaluar los informes de los especialistas holandeses y belgas. Eso fue hecho. Además, el consorcio ruso presentó una investigación publicada anteriormente.
«Sin embargo, la fiscalía no los trajo al caso…La fiscalía no puede pintar una imagen tan distorsionada de la realidad», dijo la abogada.
Es posible que esta declaración en particular se convirtiera en una ducha fría para el fiscal Berger. Después de todo, tuvo que negarse a aceptar como prueba un memorando secreto estadounidense, que supuestamente contiene imágenes del espacio, confirmando que Rusia está directamente involucrada en el accidente del MH17.
La consideración del caso MH17 continuará en un futuro próximo. Sin embargo, el fiscal holandés confirmó una vez más hacia dónde va todo.
La confirmación de “Almaz-Antey” de que Rusia no estuvo involucrada en el accidente aéreo nunca se incluyó.
Los informes de la compañía rusa desmienten el mito de que el avión fue derribado por un supuesto misil ruso del sistema de defensa aérea “BUK”.