El Acuerdo de Escazú sigue sin ratificarse por Colombia, luego que los legisladores del partido de gobierno Centro Democrático y sus aliados sabotearan su votación en el Congreso, afirmó hoy el senador de Alianza Verde Antonio Sanguino. La propuesta de ley que, en su momento tenía mensaje de urgencia del gobierno de Iván Duque, requería el trámite de las comisiones segundas del senado y la cámara de representantes, esta última no convocó a plenaria el sábado, el penúltimo día de la legislatura que recién concluyó.
En varias ocasiones la directiva del congreso pospuso su debate y votación hasta que al cierre del período legislativo el proyecto quedó a la deriva.
Aunque el Gobierno podría tramitarlo en el nuevo período que comienza próximo 20 de julio, la ratificación de la iniciativa a la cual la actual administración le dio el visto bueno en 2019 seguiría dilatándose.
De acuerdo con Sanguino y otros congresistas, el Acuerdo de Escazú protege cuatro derechos para la defensa del medio ambiente: acceso a la información de proyectos ambientales; participación pública en los mismos; justicia eficaz para dirimir las controversias entre empresas y comunidades; y protección a los líderes ambientales.
La organización internacional Global Witness señaló que Colombia con 64 muertes fue el país con más líderes ambientales asesinados en 2020, cifra que superó con creces los 24 del año 2019, y la mayoría de los casos siguen en la impunidad.
Sin embargo, los partidos que apoyan al Gobierno, en particular el oficialista Centro Democrático, señalan que el tratado viola la soberanía jurídica del país, al considerar que existen suficientes leyes en Colombia que garantizan la defensa del medio ambiente.
Asimismo, el empresariado representado por la Sociedad de Agricultores, la Federación de Cafeteros, entre otros, desde el año pasado hacen un intenso lobby con congresistas para lograr el archivo de la propuesta de ley.
Dicho acuerdo en materia ambiental fue adoptado en Costa Rica, el 4 de marzo de 2018 y firmado por el presidente Iván Duque en diciembre de 2019.
Impulsado por la Cepal, el Acuerdo de Escazú es considerado el primer tratado multilateral en América Latina y el Caribe sobre asuntos ambientales y que da apoyo a los derechos humanos en general y los ambientales en particular.
Fue firmado por 24 países del continente y ratificado por 12, de ellos México y Argentina fueron los últimos en hacerlo en sus congresos durante este semestre.
‘¿Y por qué el presidente Duque no cita a sesiones extraordinarias al Congreso para aprobar el Acuerdo de Escazú? Su compromiso con la defensa del medio ambiente es solo discurso para agradar a la comunidad internacional y a la ONU.
Lo suyo no es la ecología, sino la cosmetología’, escribió el senador Iván Cepeda en su cuenta de Twitter.