Perú tendrá hoy una tensa jornada de marchas de seguidores de Pedro Castillo, a quien muchos consideran virtual presidente electo, y de su rival, Keiko Fujimori, que intenta revertir la mayor votación del primero.
La movilización del maestro rural izquierdista, denominada ‘Por la defensa de la democracia y de la Patria áNo al golpe de Estado!’, fue convocada el jueves en una conferencia de prensa por decenas de partidos, organizaciones sociales y colectivos ciudadanos.
En realidad se trata de una jornada de marchas en todo el país, contra lo que amplios sectores consideran maniobras abogadiles de Fujimori y planteamientos golpistas como el de anular el balotaje del 6 de junio, bajo el supuesto de que los alegatos de la candidata determinan que el proceso electoral está viciado.
Por su parte, el fujimorismo convocó por redes de Internet a la llamada ‘marcha del millón’ el mismo nombre de la que realizó el presidente norteamericano Donald Trump, con quien es comparada por medios internacionales Fujimori por su actitud.
En la capital, participarán miles de seguidores de Castillo llegados del interior y que se mantienen en actitud de vigilia a la espera de que su candidato sea proclamado.
La candidata proyecta una demostración de fuerza en la ciudad en la que obtuvo su mayor votación, mientras Castillo ganó en la mayoría de las demás regiones y en las redes muchos internautas aseguran que están pagando entre 50 y 60 soles (entre 13 y 15 dólares por asistir).
Como los ánimos están caldeados por la espera del desenlace electoral, el ministro del Interior, José Elice, llamó a la alma y anunció que tres mil policías especializados controlarán las movilizaciones e impedirán que se acerquen una a la otra.
Exmilitares derechistas aliados de Fujimori apoyan sus presiones para que el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) acepte sus reclamos -carentes de sustento legal, según casi todos los expertos electorales- y al menos uno de ellos planteó que el Congreso elegido convoque nuevos comicios.
Exoficiales llamaron además en una carta a los jefes de las Fuerzas Armadas que, si el JNE no atiende las exigencias de Fujimori, no reconozcan al presidente proclamado, es decir Castillo, lo que rechazó el presidente Francisco Sagasti por tratarse de una incitación a quebrantar el orden constitucional.
Además, el exjuez Javier Villa presentó ante el Poder Judicial una acción de amparo a fin de que anulen las elecciones por estar supuestamente viciadas y usó los argumentos de Fujimori.
El pedido, según juristas consultados, se estrella con la norma constitucional que señala que una elección solo puede anularse si un tercio de los electores votaron en blanco o viciaron el voto.