El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, informó que al menos 13 personas murieron en la ciudad durante las protestas.
Mientras el Gobierno colombiano militariza el país para controlar el movimiento social que desde hace más de un mes protesta contra las políticas neoliberales y la represión policial, ahora en Cali la fuerza pública tomó las calles este domingo para desbloquear las vías.
Autoridades municipales de Cali, capital del Valle del Cauca, y representantes de primera línea estuvieron reunidos en la noche del sábado, pero no lograron establecer acuerdos y la mesa de diálogo se levantó.
Cali, epicentro de las movilizaciones desde que inició el Paro Nacional el pasado 28 de abril, experimentó este vienes una de las jornada más violenta en el último mes, cuando elementos de la fuerza pública y hombres vestidos de civil dispararon contra los manifestantes.
En videos publicados en redes sociales se evidenció la manera como varios civiles armados dispararon en contra de los manifestantes en los hechos de violencia ocurridos en Ciudad Jardín, en el sur de Cali.
Lo que más generó rechazo a esta actuación, es que las personas armadas se encontraban en compañía de varios uniformados de la policía.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, informó este sábado que al menos 13 personas murieron en la ciudad colombiana durante la jornada de protestas del viernes.
«La fiscalía nos reporta 13 homicidios en el día de ayer», dijo el funcionario en una rueda de prensa. Ospina agregó que «un número muy importante de las muertes que hemos tenido el 28 de mayo han estado asociadas (…) a esta situación del paro nacional».
Cali, con unos 2,2 millones de habitantes, es el epicentro de violentas protestas y bloqueos de vías que exasperan a una parte de la población y han sido reprimidos con brutalidad por la policía.
El recrudecimiento de la violencia se produjo a raíz del decreto expedido por el presidente Iván Duque, sobre ofrecer asistencia militar en ocho departamentos y sus municipios, para lo cual se han movilizado miles de soldados.
En la capital del Valle Cauca se dio la orden a las autoridades para iniciar el levantamiento de barricadas y escombros.
La jornada inició en el barrio Meléndez, en donde un joven indígena fue asesinado y por lo menos dos personas más resultaron heridas en medio de enfrentamientos durante el pasado viernes.
Sobre la violenta jornada del viernes, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, expresó su preocupación este domingo por los enfrentamientos en la ciudad de Cali , que dejaron más de una decena de muertos, y pidió diálogo y una investigación independiente.
«Es esencial que todas las personas que presuntamente causaron lesiones o muerte, incluidos funcionarios del Estado, estén sujetas a investigaciones rápidas, efectivas, independientes, imparciales y transparentes, y que los responsables respondan ante la ley», indicó.
Por otra parte, el Comité Nacional de Paro espera reunirse este domingo con la comisión del gobierno de Iván Duque para lograr avanzar a una negociación del pliego de emergencia y hallar una salida a la crisis en Colombia.
La semana pasada el Comité señaló que el gobierno colombiano busca dilatar las negociaciones luego de posponer la firma de un preacuerdo alcanzado sobre las garantías para la protesta social.
Según las demandas del Comité Nacional de Paro, el Gobierno debe abstenerse de adoptar medidas como el Estado de Conmoción Interior, que puede afectar el derecho a la protesta, retirar al ejército y al Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de las calles.