Moscú está trabajando activamente con todas las partes del conflicto yemení y actores externos en un intento por ayudar a resolver la situación en el país, dijo el miércoles el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, en una reunión con su homólogo yemení, Ahmad Awad bin Mubarak.
«Estamos seriamente preocupados por la situación en Yemen, un país amigo desgarrado por una guerra civil. Estamos trabajando activamente con todas las partes en el conflicto y todos los actores externos. Apoyamos el papel clave de las Naciones Unidas. Hoy, nos gustaría escuchar su evaluación de los desarrollos actuales, que sería útil en nuestros esfuerzos futuros», dijo Lavrov.
La guerra entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes hutíes se ha desatado en Yemen desde agosto del 2014. El conflicto desencadenó una importante crisis humanitaria. Según las Naciones Unidas, más de 24 millones de personas en Yemen, alrededor del 80% de la población del país, necesitan asistencia humanitaria, mientras que el número de desplazados internos ha superado los tres millones.