Los bombarderos estratégicos de largo alcance Tupolev Tu-22M3 de Rusia han aterrizado en la base aérea de Hmeymim en Siria por primera vez desde que se modernizó su pista. Estos aviones estuvieron activos en Siria entre el 2015-2017, atacando objetivos terroristas. A partir de ahora, quedan pocas unidades del Estado Islámico en Siria para que estos aviones apunten, pero Moscú parece tener otros objetivos en mente, escribe Nezavisimaya Gazeta.
El presidente del Comité Central de la Unión de Militares de toda Rusia, el capitán de primer rango Oleg Shvedkov, dijo al periódico que el despliegue de tres bombarderos de largo alcance Tu-22M3 en la base aérea de Hmeymim tiene múltiples propósitos.
«Primero, Rusia usa casi toda la gama de armas en el Medio Oriente. Ahora que la pista de la base aérea ha sido mejorada, está lista para bombarderos supersónicos», señaló el experto. «En segundo lugar, había planes para equipar estos bombarderos con nuevos misiles, incluidos los hipersónicos. En tercer lugar, los aviones Tu-22M3 son capaces de controlar no solo la región del Mediterráneo sino también todas las bases de la OTAN en el norte de Europa, así como en el norte de África”, especificó Shvedkov.
El editor jefe de la revista Arsenal Otechestva (Arsenal de la Patria), Viktor Murakhovsky, a su vez, le dijo a Vedomosti que la llegada del avión Tu-22M3 a Siria no tenía nada que ver con la situación militar y política del país. Se trata de esfuerzos para implementar un plan para crear un centro avanzado donde se podrían desplegar bombarderos de largo alcance y que también podría servir como un aeródromo avanzado para la detección de radar de largo alcance y aviones de guerra electrónica.
La medida tiene como objetivo dejar en claro que los estadounidenses no son los únicos que pueden desplegar sus bombarderos estratégicos en Reino Unido y Noruega, desde donde realizan vuelos hacia las fronteras de Rusia, enfatizó el experto.