. 
Esto se produce cuando Israel confirmó que el Gabinete de Seguridad había votado por unanimidad para aprobar un alto el fuego entre Tel Aviv y Hamas el 20 de mayo.
El 21 de mayo se produjeron nuevos enfrentamientos entre las autoridades palestinas e israelíes en el recinto de la mezquita de Al-Aqsa en la cima del Monte del Templo en Jerusalén.
Un portavoz de la policía israelí ha dicho que los palestinos estaban arrojando piedras a los agentes, por lo que las autoridades tuvieron que iniciar medidas de represión «antidisturbios». Según los informes, las fuerzas del orden también utilizaron granadas paralizantes y gases lacrimógenos para dispersar a las multitudes de palestinos implicados en los enfrentamientos.
Los enfrentamientos comenzaron después de las oraciones del viernes en la mezquita, según la policía.
El alto el fuego del 20 de mayo detuvo 11 días de hostilidades militares entre Israel y Hamas. La violencia comenzó tras la decisión de un tribunal israelí de desalojar a varias familias palestinas de sus casas en el barrio de Sheikh Jarrah en Jerusalén.