Las autoridades rusas continuarán sus esfuerzos para mejorar las reglas sobre el uso de armas por parte de civiles a raíz de la tragedia del tiroteo en una escuela en Kazán, dijo el viernes el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
El jefe de la Guardia Nacional de Rusia, Viktor Zolotov, presentó el jueves propuestas sobre requisitos más estrictos para otorgar licencias a los civiles para obtener armas.
Cuando se le preguntó qué pensaba el Kremlin sobre estas propuestas y si creía que estas medidas eran suficientes, Peskov aseguró que «este trabajo continuará».
Según el portavoz del Kremlin, el presidente Vladimir Putin había apoyado estas medidas y «pidió seguir trabajando en ellas», incluso en conjunto con expertos y legisladores. «Este trabajo continuará», repitió.