El productor estadounidense de automóviles eléctricos Tesla habría postergado sus planes de comprar terrenos para expandir su planta en la provincia china de Shanghai y convertirla en el centro de exportación global de la compañía, a medida que aumenta la incertidumbre sobre las relaciones entre Estados Unidos y China.
Tesla se abstuvo de ofertar por un terreno que se encuentra cerca de su fábrica, según fuentes anónimas familiarizadas con el asunto, según lo citado por Reuters.
Con una capacidad anual de hasta 500,000 vehículos, la planta de la compañía en Shanghai fabrica actualmente vehículos Model 3 y Model Y a una tasa de 450,000 unidades por año.
Anteriormente, se informó que el fabricante de automóviles planeaba aumentar la capacidad de las líneas de producción existentes para expandir las exportaciones de su Model 3 fabricado en China a más mercados, incluido Estados Unidos, según las fuentes. Actualmente, la compañía envía modelos 3 fabricados en China a Europa.
Sin embargo, con la imposición de aranceles del 25% a los autos eléctricos chinos importados, además de los gravámenes existentes introducidos bajo el ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que aún están vigentes, el fabricante de automóviles planea poner límites a la participación de la producción de China en su producción global.