Las acaloradas manifestaciones sobre una propuesta de reforma fiscal en Colombia han continuado incluso después de que el gobierno retirara el controvertido proyecto de ley, reavivado por la muerte de un joven activista que, según informes, recibió un disparo en la cabeza por parte de la policía.
Con el lema «Alto a la masacre», los manifestantes salieron a las calles en varias ciudades el lunes, tras la noticia de que, según informes, la policía antidisturbios disparó en la cabeza a Nicolás Guerrero, de 22 años, en la ciudad de Cali. La nueva ronda de protestas se extendió desde Cali en el suroeste hasta la capital Bogotá, así como Medellín y Barranquilla en el norte, informó AFP.
Antes de que fuera retirada el domingo por el presidente Iván Duque, la propuesta de reforma tributaria desencadenó días de intensas protestas y una huelga nacional que comenzó el miércoles pasado. Los enfrentamientos entre activistas y fuerzas de seguridad dejaron al menos 18 manifestantes y un oficial de policía muertos, según el Defensor del Pueblo de Colombia. Más de 800 personas también resultaron heridas en el caos.
Este balance es provisional, debido a que la represión continuó la noche del lunes con un saldo extraoficial de dos personas muertas.
El Comité Nacional del Paro de Colombia denunció el lunes que la represión por parte de las fuerzas de seguridad durante las manifestaciones en contra de la reforma fiscal ha dejado un saldo provisional de 27 asesinados y unos 124 heridos.
En un balance que comprende el periodo del 28 de abril al pasado 2 de mayo, la entidad indicó que fueron reportados 1.089 casos de violencia policial y 27 manifestantes asesinados, 12 de ellos en Cali, capital del surocidental departamento del Valle del Cauca.
Sin embargo, este balance es provisional, debido a que la represión continuó la noche del lunes en diversos sectores de Cali, en especial en Siloé, donde organismos humanitarios reportaron la muerte de al menos dos personas.
Han circulado imágenes en línea que muestran enfrentamientos y violencia policial contra manifestantes durante la última semana, incluido un clip desgarrador que pretende capturar el momento en que los agentes dispararon fatalmente a un hombre durante una pelea.
https://twitter.com/anld_04/status/1389397067534057473?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1389397067534057473%7Ctwgr%5E%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.rt.com%2Fnews%2F522819-colombia-protests-deaths-police%2F
Footage from the ongoing mass anti-government/police brutality protests in Colombia led by students and young people. This looks like police tear-gassed a public bus… full of people inside https://t.co/TsxmsMUH0r
— Aaron Sánchez-Guerra (@aaronsguerra) May 4, 2021
The protests continue in #Colombia This video was taken today in #Manizales and it is one of many examples of the police violence and human rights violations in Colombia #ParoNacional3M #SOSColombiaDDHH #ParenLaMasacre @amnesty @hrw @CorteIDH pic.twitter.com/sJWrJYDhVI
— Serhat Tutkal (@SerhatTutkal) May 4, 2021
El gobierno de Duque incluso ha desplegado militares en algunas áreas para controlar los disturbios, incluso en Cali, donde las protestas supuestamente se han convertido en disturbios y saqueos. Algunos activistas han alegado que las fuerzas de seguridad están utilizando munición real.
https://twitter.com/dancohen3000/status/1389300388352909313?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1389300388352909313%7Ctwgr%5E%7Ctwcon%5Es1_&ref_url=https%3A%2F%2Fwww.rt.com%2Fnews%2F522819-colombia-protests-deaths-police%2F
El ministro de Finanzas, Alberto Carrasquilla, renunció a su cargo el lunes, diciendo que quería darle al gobierno margen de maniobra para proceder después de que la propuesta tributaria, en la que participó en la elaboración, fuera retirada debido a las protestas. El plan buscaba aumentar los ingresos del gobierno cerrando una serie de lagunas y aumentando nuevos impuestos a los ciudadanos y propietarios de negocios, así como impuestos sobre las ventas de servicios públicos y algunos alimentos. Carrasquilla será reemplazado por el actual ministro de Comercio, José Abondano.
La retirada del proyecto de ley ha quitado un poco de viento a los manifestantes, y dos grandes sindicatos se retiraron de una huelga general prevista para esta semana. Sin embargo, algunos organizadores todavía están avanzando, y otro grupo prometió organizar una protesta masiva y una huelga el miércoles por las reformas propuestas a la salud.
En medio de la indignación pública por la violencia policial, el gobierno colombiano ha buscado culpar a las “organizaciones criminales” por los disturbios. Durante una conferencia de prensa el lunes, el ministro de Defensa, Diego Molano, afirmó tener inteligencia que prueba los vínculos entre los grupos armados y las protestas, citando a las facciones rebeldes de izquierda FARC, disueltas oficialmente en 2017 después de un acuerdo de paz, y al Ejército de Liberación Nacional (ELN) por su nombre, pero se negó a compartir pruebas con los periodistas.
Aunque a menudo se apresura a condenar las prácticas «antidemocráticas» de estados extranjeros, la administración Biden hasta ahora no ha ofrecido comentarios sobre los disturbios en Colombia, cuyo gobierno ha sido durante mucho tiempo un aliado cercano de Washington.
La brutalidad policial ha sido el punto focal de las protestas anteriores en Colombia, con una ola de manifestaciones que comenzó el año pasado después de la muerte del abogado Javier Ordóñez, quien fue golpeado y atacado repetidamente por agentes por presuntamente violar las restricciones locales de coronavirus.