Blinken dijo que ni Estados Unidos ni China están buscando la confrontación militar ya que es contraria a sus intereses


Al mismo tiempo, el secretario de Estado señaló que «en los últimos años, China se ha vuelto más represiva en casa y más agresiva en el exterior».

Ni Estados Unidos ni China quieren un enfrentamiento militar, ya que va en contra de sus intereses. Así lo anunció el domingo el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, en una entrevista con CBS

«Creo que esta [confrontación militar] es completamente contraria a los intereses tanto de China como de Estados Unidos de avanzar hacia este punto o incluso elegir esta dirección», dijo.

Al mismo tiempo, según Blinken, «China cree que puede, debe y será el país dominante en el mundo», agregó que «en los últimos años, China se ha vuelto más represiva en casa y más agresiva en el exterior. »

Además, el Secretario de Estado de Estados Unidos señaló que su país no tiene la oportunidad de no cooperar con la República Popular China. «No podemos permitirnos el lujo de no interactuar con China», dijo, y agregó que en todas las áreas de las relaciones con China, ya sea confrontación, competencia o cooperación, existen «dificultades reales» en la interacción de los dos países.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, al hablar este miércoles con su primer discurso ante el Senado y la Cámara de Representantes del Congreso, dijo que Estados Unidos tiene la intención de mantener una poderosa presencia militar en las aguas de la región Asia-Pacífico, pero no busca conflicto con la República Popular China. También enfatizó que Estados Unidos está en un estado de competencia con China y varios otros países por la palma en el siglo XXI y se opondrá a «prácticas comerciales desleales que afectan negativamente a los trabajadores y la industria estadounidenses».

En respuesta, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, señaló que «China está siguiendo un camino pacífico de desarrollo» y cree que «la cooperación es un factor clave en la construcción de relaciones entre Beijing y Washington».

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