El comandante de las fuerzas estadounidenses en Afganistán y la misión de apoyo decidido de la OTAN, Austin Scott Miller, confirmó que había comenzado el proceso de retirada de las fuerzas estadounidenses de Afganistán. Esto significa que la orden del presidente estadounidense Joe Biden de poner fin a la guerra antes del 11 de septiembre está en curso, señala Nezavisimaya Gazeta. La pregunta es cómo afectará la retirada de las fuerzas estadounidenses a los vecinos de Afganistán, a saber, China. No se descarta que haya enfrentamientos entre partidarios del gobierno de Kabul y el movimiento talibán (proscrito en Rusia), que podría ser utilizado por yihadistas entre musulmanes chinos, sugiere el diario. Por otro lado, Beijing puede tener acceso a los ricos recursos minerales de Afganistán.
Para China, el lado positivo de la retirada de EE.UU. es que su principal rival geopolítico se está yendo y las posibilidades de enfrentarse a EE.UU. en la región son mínimas. La desventaja es que hasta ahora no está claro quién tomará la iniciativa para evitar una desestabilización o una guerra civil en el estado vecino.
Beijing no tiene deseos ni oportunidades reales de lidiar con Afganistán, especialmente porque a partir de ahora, la situación en la frontera compartida de China con Afganistán que se extiende por menos de 50 millas es bastante tranquila. Sin embargo, Afganistán ha servido muchas veces como refugio para militantes que planean ataques contra otros estados. A China le preocupa que los yihadistas puedan reclutar militantes entre los uigures, un grupo étnico mayoritariamente musulmán en el noroeste de China.
Arkady Dubnov, experto en Afganistán y Asia Central, señaló a Nezavisimaya Gazeta que China había estado bastante disgustada con la presencia de Estados Unidos en Afganistán durante todos esos años.
«No porque esperaran enfrentamientos con Estados Unidos. En particular, los estadounidenses tenían ojos y oídos en Afganistán para monitorear lo que estaba sucediendo en China. Pero lo más importante, la presencia estadounidense fue lo que sofocó la ambición y los recursos de los extremistas islámicos», señaló.
Sin embargo, China comprende que es poco probable que Estados Unidos abandone la región. En este momento, hay una discusión activa de que Estados Unidos recupere su presencia militar en Asia Central. El New York Times informó anteriormente que algunas unidades militares pueden trasladarse a lo largo de las fronteras de Afganistán en Asia Central para evitar un agravamiento de la situación, a saber, a Tayikistán, Uzbekistán y Kirguistán, especificó el experto.