Ómnibus incendiados y enfrentamientos con las fuerzas policiales son el saldo hoy de una tercera noche y madrugada de protestas en ciudades de Chile en rechazo a la política del gobierno de Sebastián Piñera.
Según reportó Carabineros, en las barriadas de Villa Francia y La Pintana, en esta capital, fueron quemados sendos ómnibus del transporte público, tras ser interceptados por grupos de personas que protestaban contra la decisión del gobierno de llevar al Tribunal Constitucional (TC) un proyecto legislativo de amplio respaldo popular.
El teniente coronel Rodrigo Soto, de la Prefectura Santiago Oriente, informó que también fueron atacadas por manifestantes comisarías en las comunas (municipios) de Peñalolén y de Ñuñoa, con saldo de al menos cuatro detenidos.
Asimismo la web emol.cl informó de dos intentos de saqueos a una empresa de gas en la comuna de El Bosque y a un supermercado en la de San Bernardo, que fueron evitados por la intervención de la policía aunque no se reportaron personas detenidas en esos hechos.
Tal como ocurrió en las noches anteriores, se escucharon fuertes cacerolazos durante largo rato en diferentes puntos de esta capital, donde también grupos de vecinos salieron a las calles e incendiaron barricadas, a pesar del toque de queda imperante por la pandemia, para expresar su descontento con la política del gobierno.
Las protestas y el malestar generalizado se multiplicaron desde que en la tarde del martes el Ejecutivo presentó en el TC un requerimiento para impedir la aprobación de un proyecto legislativo para un tercer retiro de fondos de pensiones, que cuenta con respaldo mayoritario de la población.
Esa iniciativa fue aprobada la víspera por el Senado y hoy se espera sea refrendada también por la Cámara de Diputados, con lo cual podría hacerse efectiva, pero ahora deberá esperar que el TC diga su veredicto, lo que puede demorar semanas.
La decisión gubernamental fue rechazada por la oposición al completo e incluso dentro de las filas del oficialismo algunos de cuyos dirigentes pidieron al presidente Sebastián Piñera dar marcha atrás al requerimiento e incluso patrocinar un tercer retiro de fondos.
El empleo de sus propios ahorros por los contribuyentes para enfrentar la dura situación económica agudizada por la crisis sanitaria, es visto como la única salida para millones de chilenos que no han tenido acceso a las tardías e insuficientes ayudas del gobierno.