Los buques de guerra británicos entrarán en el Mar Negro como señal de “apoyo” a Ucrania. El Departamento de Defensa de Estados Unidos también planeó enviar dos destructores de la Armada al Mar Negro, pero abandonó la idea en el último momento. Mientras tanto, Moscú ha anunciado que se prohibirá a los buques de guerra extranjeros ingresar a tres áreas en el Mar Negro durante seis meses debido a los ejercicios navales rusos, señala Kommersant.
«La decisión de Rusia de cerrar parte del Mar Negro es una advertencia de que será un área peligrosa durante los simulacros que se realicen en los rangos costeros y marítimos. El procedimiento se lleva a cabo todos los años durante los ejercicios de primavera y otoño. Sin embargo, dadas las crecientes tensiones en Ucrania, la medida tiene un significado especial para los políticos occidentales que la consideran una nueva amenaza para Kiev», explicó el editor en jefe de la revista “Arsenal Otechestva” (“Arsenal de la Patria”), Viktor Murakhovsky.
Vasily Kashin, director adjunto del Centro de Estudios Integrales Europeos e Internacionales de la Escuela Superior de Economía, cree que la decisión de Moscú de cerrar parte del Mar Negro debe considerarse una medida de precaución destinada a prevenir provocaciones en la región.
«Solo es posible garantizar el paso seguro de un buque de guerra extranjero a través de aguas neutrales si cumple una serie de reglas, incluido el requisito de apagar los detectores de radio y los sistemas de armas, y no se estén realizando simulacros en la zona», dijo el experto, y agregó: «La situación frente a la costa de Crimea es especial porque Estados Unidos y otros países de la OTAN no reconocen la península y sus aguas como parte de Rusia».
«Rusia probablemente esperaba que Estados Unidos y sus aliados intentaran provocaciones, particularmente enviando barcos a las aguas de Crimea y violando las reglas de paso seguro, y decidió ser proactiva», señaló el analista.