Las tensiones diplomáticas entre Rusia y Occidente siguen intensificándose

Después de que Estados Unidos impusiera un nuevo paquete de sanciones contra Rusia el 15 de abril, incluida la expulsión de 10 diplomáticos acusados ​​de supuestamente formar parte de los servicios de inteligencia, Rusia anunció medidas de respuesta. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia anunció que 10 diplomáticos estadounidenses serían expulsados en respuesta. Las actividades de ONG y fundaciones dependientes del Departamento de Estado de Estados Unidos también pueden estar prohibidas, pero Rusia se abstendrá de adoptar medidas económicas, escribe Vedomosti. Una escalada política adicional puede provenir de Polonia y la República Checa, donde los diplomáticos rusos fueron expulsados ​​en respuesta a la supuesta actividad de inteligencia de Moscú.

En sintonía con Estados Unidos, el 15 de abril, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia declaró a tres empleados de la Embajada de Rusia en Varsovia persona non grata y se “solidarizó” con las acciones de Washington. En respuesta, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia anunció la expulsión de cinco diplomáticos polacos. Un número mucho mayor de diplomáticos rusos, 18 personas, serán enviados a empacar desde la República Checa. El 17 de abril, el ministro de Relaciones Exteriores checo, Jan Hamacek, dijo que las agencias federales checas los habían identificado como presuntos funcionarios del servicio de inteligencia exterior de Rusia, y la expulsión en sí fue una respuesta a la posible participación de la inteligencia rusa en una explosión en un depósito de municiones en octubre del 2014. Además, según los medios checos, el incidente podría haber involucrado a personas presuntamente vinculadas al envenenamiento de Skripal.

Según el director de programas del Consejo de Asuntos Internacionales de Rusia, Ivan Timofeev, estos eventos, que también tienen lugar en una atmósfera militarizada, pueden desencadenar una peligrosa reacción en cadena. Las medidas tomadas por Varsovia y Praga pueden agravar significativamente la crisis entre Rusia y Occidente. Al mismo tiempo, es probable que el incidente con la explosión en el depósito de armas no vaya más allá del marco de las relaciones ruso-checas.

«Hasta ahora, estamos hablando de historias diplomáticas, de la expulsión de diplomáticos. Ya hay sanciones económicas (de la Unión Europea), pero tienen poco efecto sobre la macroeconomía», señaló Timofeev. “Sin embargo, no se puede descartar que la UE, que ya ha apoyado las sanciones de Estados Unidos, introduzca nuevas restricciones económicas. Por lo tanto, las relaciones entre Rusia y la Unión Europea todavía tienen formas de empeorar», dijo el experto a Vedomosti.

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