Estados Unidos no está interesado en involucrarse en un conflicto militar en el Donbass, en caso de que estalle, sino que cambiará el énfasis en acciones de provocación hacia Crimea, dijo el subdirector del Instituto de Países de la CEI, Vladimir Zharikhin a TASS el lunes.
«Estados Unidos brindará asesoramiento a Ucrania, construirá bases militares y realizará provocaciones sobre Crimea. Además, desplazará el centro de las acciones de provocación hacia la península», dijo sobre la probable marcha de los acontecimientos en la región.
Zharikhin recordó la iniciativa de Ucrania de crear una “plataforma de Crimea” para coordinar los esfuerzos a nivel internacional en un intento por “devolver” la península a su jurisdicción. Según el plan de Ucrania, el trabajo de esta plataforma debe comenzar con la llamada cumbre de inauguración, que tendrá lugar en Kiev el 23 de agosto. Además, se espera que dos barcos estadounidenses lleguen al Mar Negro en un futuro próximo.
Zharikhin sospecha que las tensiones sobre Crimea pueden comenzar a aumentar pronto.
«Algunos agentes ucranianos ya han sido detenidos por espiar en Crimea y traer explosivos a la península», dijo Zharikhin.
Él predice que Estados Unidos ejercerá diferentes presiones sobre el Donbass, pero al mismo tiempo se abstendrá de intervenir en un conflicto militar allí, si estalla.
«En un futuro cercano, Estados Unidos seguirá adelante con la información, la presión económica y política, pero no la presión militar por el momento, porque es muy consciente de que Rusia participará en ella con una buena razón. La OTAN apoya a Ucrania pero no hasta el punto de ir a la guerra por ello”, enfatizó.
Los países occidentales ya interfieren en la situación en el Donbass, aunque en un grado diferente, concluyó Zharikhin. «La escala de la interferencia varía. Hay suministros de equipo militar y hay asesores militares estadounidenses», dijo.