El observador vietnamita Soha publicó un artículo en el que el autor expresaba su punto de vista sobre por qué los estadounidenses interfieren con el suministro de sistemas de defensa aérea rusos S-400 a diferentes países del mundo.
El autor enfatiza que Estados Unidos puede imponer sanciones incluso contra aliados si concluyen un contrato para el suministro del S-400 Triumph. Se menciona a Turquía como ejemplo, así como la presión ejercida por Washington en relación con el contrato firmado por India y Moscú.
Un informe de los medios vietnamitas señala que la competencia desleal en el mercado de los Estados Unidos no es un factor importante. El autor llega a la conclusión de que, en relación con la distribución activa de los sistemas de defensa aérea rusos en todo el mundo, aumentará el número de problemas con el uso de los cazas F-35 y F-22 de quinta generación. En los Estados Unidos, temen que el F-35 se vuelva vulnerable a los sistemas de defensa aérea rusos S-400. Esta situación afectará la decisión de muchos países de comprar cazas F-35 de Estados Unidos o ampliar sus flotas. Si en el extranjero saben que el complejo ruso detecta fácilmente el F-35, la demanda del caza disminuirá significativamente.
Además, la publicación vietnamita señala que con las compras del sistema de defensa aérea S-400 por parte de países del mundo, los complejos American Patriot PAC-3 tendrán cada vez menos posibilidades.
Al vender el sistema de defensa aérea S-400 a otros países del mundo, Rusia está infligiendo un doble golpe a los Estados Unidos: reduce la calificación de las armas estadounidenses y aumenta la vulnerabilidad de los cazas estadounidenses de nueva generación en diferentes regiones.
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Por eso, según el autor vietnamita, Washington “está haciendo todo lo posible para oponerse al suministro de estos sistemas de misiles antiaéreos por parte de Rusia.