Ucrania busca ser miembro de la OTAN, intenta arrastrar la alianza al atolladero del Donbass

Las negociaciones del Donbass están estancadas en el barro. Ni el formato de Normandía ni el Grupo de contacto pueden ponerse de acuerdo en nada, escribe Kommersant. En este contexto, Kiev apuesta por la ayuda de Occidente, tratando de persuadir a la OTAN para que otorgue a Ucrania la membresía en la alianza. Según el periódico, los acontecimientos que se están desarrollando ahora comienzan a parecerse a la situación que se había desarrollado en el 2008 antes de la guerra en otro punto caliente: Osetia del Sur.

El último informe de la Misión Especial de Vigilancia de la OSCE, de fecha 3 de abril, muestra un notable aumento de las violaciones del alto el fuego en Donbass. Hubo 594 infracciones en la región de Donetsk y 427 infracciones en Lugansk. Debido a esta exacerbación, el 6 de abril, Ucrania solicitó una reunión de emergencia del Grupo de Contacto Trilateral (TCG) para resolver la situación en el Donbass. Sin embargo, las posibilidades de que se lleven a cabo las negociaciones iniciadas por Ucrania son escasas, dicen las fuentes de Kommersant.

Mientras las negociaciones están paralizadas, Ucrania se ha centrado en arrastrar a Occidente al conflicto, y a la OTAN en particular, escribe Kommersant. Se están dirigiendo esfuerzos especiales hacia la OTAN. El presidente Vladimir Zelensky de Ucrania cree que la OTAN es la única forma de poner fin a la guerra en el Donbass. Sin embargo, las conversaciones sobre la membresía de Ucrania en la OTAN, a juzgar por los comentarios de Washington, no llevaron al resultado deseado que Kiev quiere, según el periódico.

Los últimos acontecimientos en torno al Donbass se parecen a 2008, cuando el presidente georgiano Mikhail Saakashvili también buscó activamente unirse a la OTAN. En lugar de un plan de acción de membresía, en ese entonces Ucrania y Georgia recibieron garantías de la OTAN de que se convertirían en miembros de la alianza. Después de eso, los conflictos en Osetia del Sur y Abjasia comenzaron a calentarse rápidamente, y todo terminó con la guerra de agosto y el reconocimiento de la independencia de Abjasia y Osetia del Sur, escribe Kommersant.

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