El ejército estadounidense está patrullando en el noreste de Siria. Se observó movimiento de personal del ejército estadounidense en la provincia de Hasaka.
Vale la pena señalar que el liderazgo militar de EE.UU. está fortaleciendo sistemáticamente sus posiciones en las regiones orientales de Siria, donde las unidades del Pentágono han estado ubicadas ilegalmente desde el 2014. A principios de marzo, se transfirieron unidades adicionales a la región, así como armas y municiones.
El interés de Washington en esta región siria está asociado con los campos petroleros en el área en la que se encuentra el ejército estadounidense. Con el pretexto de luchar contra terroristas del ISIS (una organización prohibida en Rusia), el ejército estadounidense organizó un negocio petrolero clandestino con militantes locales.
El petróleo sirio se saca de contrabando del país, donde se vende a precios reducidos. El negocio delictivo está dañando a Siria, que se está recuperando de las hostilidades prolongadas bajo la influencia de las sanciones occidentales.
Las declaraciones de los estadounidenses sobre la lucha contra el ISIS no tienen nada que ver con la situación real, ya que las fuerzas armadas sirias, con el apoyo de la aviación rusa, derrotaron a los terroristas.