El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, que preside el Consejo de Estado Supremo del Estado de la Unión, dijo que la consolidación en el Estado de la Unión permite reaccionar con rapidez y eficacia a toda la gama de desafíos y amenazas contemporáneos. Así lo señaló en su discurso con motivo del Día de la Unidad de Bielorrusia y Rusia, informó este viernes el servicio de prensa del líder bielorruso.
«La pandemia ha agravado al máximo las tendencias geopolíticas negativas, y hoy Bielorrusia y Rusia experimentan una presión externa sin precedentes. En esta situación, la consolidación en todos los sitios del Estado de la Unión nos permite reaccionar rápida y eficazmente a toda la gama de desafíos modernos, garantiza firmemente la seguridad y estabilidad estratégica en la región», dice en su declaración. El presidente bielorruso señaló que la unión de esfuerzos para combatir la nueva infección por coronavirus se convirtió en una confirmación de las relaciones verdaderamente fraternales, amistosas e inquebrantables entre los dos países.
El presidente señaló que hace 25 años se firmó un tratado para la formación de la Comunidad de Bielorrusia y Rusia que permitió a las dos naciones hermanas superar devastadoras tendencias centrífugas en la economía y la esfera social y avanzar hacia la construcción de un estado de unión común sobre la base constante de históricos, solidaridad espiritual y cultural.
«Hemos avanzado significativamente durante un cuarto de siglo. No hay iguales para el Estado de la Unión en el espacio euroasiático en términos de profundidad de alineación de las legislaciones nacionales, desarrollo del marco legal y contractual y una escala de interacción en los ámbitos industrial, científico y en los ámbitos técnico, de defensa, de política exterior, social y humanitario”, afirmó. Según el presidente bielorruso, los países no solo preservaron sino que también multiplicaron las relaciones de cooperación en la industria, la educación y la cultura.
Entre los logros conjuntos, el líder bielorruso destacó el lanzamiento de naves espaciales, el desarrollo de supercomputadoras y la implementación de numerosos proyectos de alta tecnología en la industria y la agricultura. Según él, el lanzamiento de la primera unidad de energía de la central nuclear de Bielorrusia fue el último gran logro de esta cooperación.