El presidente ruso, Vladimir Putin, ha dicho que la comunidad internacional debe unirse para hacer un nuevo pacto formal que rija el uso de Internet.
Prohibiría acciones potencialmente hostiles para mantener la paz en línea.
En una reunión del consejo de seguridad de Rusia el viernes, Putin dijo que «el espacio digital global a menudo se convierte en una plataforma para una dura confrontación en la esfera de la información, para la competencia desleal y los ciberataques».
Al mismo tiempo, dijo, “los terroristas internacionales y el crimen organizado utilizan el entorno digital. En una palabra, existen muchas amenazas potenciales para la seguridad global y general y para países individuales, incluida su soberanía e intereses nacionales «.
Como resultado, argumentó el mandatario, es necesario “acordar tratados legales internacionales universales destinados a prevenir conflictos y construir una alianza mutuamente beneficiosa en el espacio de información global, para el desarrollo sustentable de cada estado. Su objetivo sería crear condiciones favorables para la investigación científica y permitir la rápida implementación de las soluciones tecnológicas más avanzadas al tiempo que se previenen riesgos potenciales ”
A principios de este mes, el Kremlin expresó su preocupación después de que el New York Times informara que el presidente estadounidense Joe Biden estaba considerando una “serie de acciones clandestinas” dirigidas a Rusia. Se predijo que el ataque coincidiría con nuevas sanciones económicas contra Moscú, así como con una orden ejecutiva de Biden que reforzaría la seguridad de las redes del gobierno de EE. UU.
En una entrevista, Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, dijo al periódico que apoyaba la realización de operaciones secretas que serían «comprendidas por los rusos, pero que podrían no ser visibles para el mundo en general», argumentando que tales acciones obligarían una “amplia discusión estratégica” con Moscú.
La escalada se produce después de que Washington acusó a Moscú de estar detrás del colosal pirateo de espionaje SolarWinds que vio violaciones de 100 empresas comerciales en todo el mundo, así como de nueve agencias gubernamentales de EE. UU. Las agencias de inteligencia estadounidenses dicen que el incidente fue «probablemente de origen ruso». El Kremlin, sin embargo, niega cualquier participación.