Bolivia repudió hoy declaraciones del gobierno de Estados Unidos opuestas a la detención y procesamiento judicial de la expresidenta del gobierno de facto Jeanine Añez y dos de sus exministros.
Un comunicado oficial afirma que los pronunciamientos este sábado del secretario de Estado del país norteño, Antony Blinken, ‘son una desafortunada muestra de injerencia y no contribuyen a desarrollar una relación de mutuo respeto’.
Según la nota de la Cancillería, las afirmaciones de Washington contra el arresto preventivo de la exgobernante golpista y dos de sus exministros ‘no responden a información objetiva’.
Tales expresiones ‘atentan precisamente contra la institucionalidad que pretenden defender’, añade el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Luego de la ruptura del orden constitucional en noviembre de 2019, Bolivia recuperó la democracia con la asunción del Presidente Luis Arce, tras las elecciones generales del 18 de octubre de 2020, recuerda el texto.
Bolivia repuso desde entonces la plena vigencia de los derechos y garantías constitucionales y los definidos por el derecho internacional de los derechos humanos, agrega la Cancillería.
Las declaraciones de Blinken transgreden el principio de no injerencia del Convenio Marco de Relaciones Bilaterales de Mutuo Respeto y colaboración entre los Estados Unidos de América y el Estado Plurinacional de Bolivia, según el texto.
Ese documento del 7 de noviembre de 2011 dispone de forma expresa que ambos países tienen ‘el deber de abstenerse de intervenir en asuntos internos del otro, por lo que convocamos a dar cumplimiento a las obligaciones asumidas’.
El texto reitera finalmente la disposición del gobierno boliviano de ‘mantener y fortalecer sus relaciones de amistad con toda la comunidad internacional, con base en el respeto a su soberanía y autodeterminación’.
Autoridades locales dispusieron hace dos semanas el arresto, prisión preventiva y enjuiciamiento de Áñez y de sus exministros de Justicia, Álvaro Coimbra, y de Energía, Rodrigo Guzmán, acusados por el golpe de Estado de 2019.