Prometiendo el primer aumento de impuestos importante en décadas, Joe Biden argumentó que las medidas evitarían al estadounidense promedio. Resultó que mintió.
El lunes, un destacado economista de la Casa Blanca aseguró que el presidente de Estados Unidos no quiere cargar con impuestos adicionales a aquellos cuyas ganancias anuales no superen los 400.000 dólares al año. Al mismo tiempo, la administración de Biden está lista para impulsar un aumento en la tasa de impuestos corporativos. El problema es que estos dos objetivos son mutuamente excluyentes, ya que aumentar la tasa corporativa reducirá naturalmente los ingresos de la clase media, escribe Bloomberg.
En 2017, la tasa del impuesto corporativo se redujo del 35% al 21%. Biden tiene la intención de aumentarlo al 28%. Naturalmente, al promover tal idea entre las masas, el anciano demócrata colocó toda la carga del gasto en corporaciones sin rostro, evitando el hecho de que los impuestos corporativos siempre son financiados por los empleados.
Los beneficiarios de las corporaciones estadounidenses han encontrado durante mucho tiempo una forma de proteger su capital de los aumentos de impuestos. Esto fue facilitado por el retiro elemental de finanzas en el exterior. Al mismo tiempo, los empleados tienen menos movilidad y, por lo tanto, son más vulnerables a impuestos sobre la renta más altos.
Una tasa corporativa más alta reduce el rendimiento después de impuestos de la inversión adicional. Una menor inversión hace que los trabajadores sean menos productivos, lo que a su vez reduce su valor. Si los trabajadores son menos valiosos, las empresas reducirán sus esfuerzos para atraerlos y retenerlos, lo que también afectará los salarios. De esta manera, es la clase trabajadora la que pagará el precio por las ambiciones de Biden.
Un estudio del Center for Tax Policy muestra que el 20% de la carga del impuesto de sociedades recae sobre los trabajadores. La Oficina de Presupuesto del Congreso, no partidista, estima que la cifra es del 25%. Estos hechos se reflejarán en el debate sobre la política fiscal de Biden.
«Sin embargo, la calidad y el ganador del debate político no cambiarán el hecho de que los trabajadores, incluidos aquellos con ingresos por debajo de $ 400,000, enfrentarán una caída en los salarios si Biden aumenta la tasa corpor