El 20 de marzo, aviones de combate de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas llevaron a cabo varios ataques aéreos contra las posiciones de los extremistas en el campo sur y oeste de Idlib en el noroeste de Siria.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, los ataques aéreos se dirigieron a las siguientes áreas:
-Las tierras de cultivo que rodean el poblado de Beinin en el monte al-Zawiya en el sur de Idlib.
-El poblado de Bkafla al norte de la ciudad de Jisr al-Shughur en el oeste de Idlib.
No se registraron víctimas como resultado de los ataques aéreos. Lo más probable es que los objetivos fueran las posiciones del grupo terrorista Hay’at Tahrir al-Sham (HTS), el ocupante de facto de la región de la provincia de Idlib. El grupo está activo en el monte al-Zawiya y Jisr al-Shughur.
Los ataques aéreos coincidieron con un intenso bombardeo del Ejército Árabe Sirio contra las posiciones de los extremistas en el monte al-Zawiya. Según los informes, se utilizaron cohetes pesados.
Es probable que los ataques fueran una respuesta a las recientes violaciones del alto el fuego en la provincia siria de Idlib. El grupo terrorista Hay’at Tahrir al-Sham y sus aliados violaron el alto el fuego al menos 36 veces esta semana, según el Centro de Reconciliación de Rusia en Siria.
En un nuevo informe, el Centro de Reconciliación también advirtió que los extremistas se están preparando para montar una nueva provocación con armas químicas en la provincia siria de Idlib. Este complot está destinado a provocar un ataque de Estados Unidos y sus aliados contra las fuerzas gubernamentales en Siria.