En la noche del 17 de marzo, Moscú anunció que llamaría al embajador ruso en Estados Unidos, Anatoly Antonov, para consultas, en respuesta a la entrevista de Joe Biden con ABC News. Se necesitan consultas para evitar una «degradación irreversible» de las relaciones con Estados Unidos, dijo la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, María Zakharova, y agregó más tarde que Antonov permanecerá en Moscú «el tiempo que sea necesario». Según los expertos entrevistados por Vedomosti, Rusia no empeorará las relaciones bilaterales, porque ni Moscú ni Washington necesitan una escalada de tensiones.
Según el investigador principal del Instituto de Estudios Estadounidenses y Canadienses de la Academia de Ciencias de Rusia, Pavel Koshkin, se está convocando al embajador ruso para «determinar la retórica y la política futura hacia Estados Unidos». Señaló que durante las consultas, se discutirán temas estratégicos en las relaciones ruso-estadounidenses para los próximos 5 a 10 años. Según el experto, el momento de la estancia del embajador en Moscú será una señal importante. Si se queda mucho tiempo, será una «señal de advertencia». Al mismo tiempo, todavía es posible un desarrollo constructivo de las relaciones con Washington. El experto señala que Moscú no tiene la intención de llamar al embajador de Estados Unidos por el momento y está disparando un tiro de advertencia. «Se necesita una razón más seria para un retiro», explicó.
El director del Centro de Investigación Aplicada del Instituto de Estudios Estadounidenses y Canadienses de la Academia de Ciencias de Rusia, Pavel Sharikov, dijo al periódico que en la situación actual, se puede esperar cualquier desarrollo de los eventos. Dicho esto, la declaración de Biden «estaba lejos de ser algo parecido a una declaración presidencial. Y esas cosas deberían decirse en diferentes circunstancias». Es poco probable que (el presidente de los) Estados Unidos se retracte de sus palabras, pero ni Moscú ni Washington necesitan ninguna confrontación, agregó el experto de la política exterior.
Rusia reaccionó con bastante moderación y, por lo tanto, evitó un posible desarrollo del conflicto, agregó Sharikov. Según él, Washington ahora intentará suavizar el comentario de Biden, porque «una escalada basada en una declaración sin fundamento es estúpida».