La máxima prioridad hoy sigue siendo la finalización del gasoducto; otros problemas se resolverán cuando el “Nord Stream 2” entre en funcionamiento. Esta opinión fue expresada por Natalia Milchakova, subdirectora del Centro de información y análisis «Alpari», en los comentarios a la Agencia Federal de Noticias.
La Comisión Europea intenta repudiar el “Nord Stream 2”
El vicepresidente de la Comisión Europea, Franz Timmermans, expresó la opinión de que la Unión Europea no necesita el gasoducto ruso “Nord Stream 2”. Sin embargo, el proyecto ya se encuentra en sus etapas finales de construcción.
Según él, la Comisión Europea siempre ha dicho que el “Nord Stream 2” no es un elemento necesario con urgencia para el suministro de energía de la Unión Europea.
“Pero el “Nord Stream 2” existe. La Comisión de la UE debe asegurarse de que el “Nord Stream 2” se utilice de acuerdo con las normas de la UE. A Rusia no le gusta. Pero estas son las reglas de la UE”, dijo Timmermans.
Hay una salida
Como señaló Natalia Milchakova, Europa no solo necesita gas ruso, es de vital importancia. Y esto lo demostró el anormalmente frío febrero del 2021. A mediados de febrero, las instalaciones de almacenamiento de gas subterráneas en Europa se vaciaron en promedio en un 60-70%, y solo “Gazprom” puede suministrar urgentemente volúmenes adicionales de gas a la Europa congelada a través de los gasoductos ya construidos. Los proveedores de gas natural licuado no podrán hacer esto con toda su voluntad.
“Han estado hablando de la naturaleza ‘innecesaria’ del proyecto “Nord Stream 2” para la Unión Europea durante mucho tiempo, pero esto no es noticia. La Unión Europea nunca antes ha apoyado este proyecto a nivel político, aunque enfatiza que no obstaculiza la construcción del proyecto si los países de la UE individuales lo necesitan. Para las autoridades de Bruselas, esta es una posición bastante conveniente: por un lado, no se pelean contra Alemania y otros países, cuyas empresas están participando en el proyecto, por otro lado, la falta de apoyo político para el gasoducto les permite mantener la apariencia de buenas relaciones con los Estados Unidos y al mismo tiempo oponerse, aunque de palabra, a los intentos de dura presión de los Estados Unidos sobre los negocios europeos”, explicó Natalia Milchakova.
Sin embargo, el experto señaló que, en palabras del funcionario de la Comisión Europea, se puede ver un indicio muy inequívoco de que las estructuras de la UE que no intervinieron previamente en el proceso de construcción del gasoducto pueden intervenir cuando se ponga en funcionamiento “Nord Stream 2” y permitan que “Gazprom” utilice sólo la mitad de este gasoducto. Al mismo tiempo, el 50% restante del gas debe ser proporcionado por proveedores de otros países, de acuerdo con el «tercer paquete energético» de las leyes de la UE.
“Pero este problema puede resolverse con éxito si, por ejemplo, “Gazprom” vende parte del gas producido a una de las empresas energéticas alemanas, y este gas irá a Europa a través del “Nord Stream 2”. Ahora la máxima prioridad es completar la construcción del gasoducto, el resto de los problemas se resolverán cuando el “Nord Stream 2” entre en funcionamiento”, concluyó Natalia Milchakova.
El “Nord Stream 2” es un gasoducto de Rusia a Alemania con una capacidad de 55 mil millones de metros cúbicos por año. A fines del 2019, el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un plan para el presupuesto militar del país para el próximo año, que incluye la imposición de sanciones al proyecto.
Permítanos recordarle que Berlín lamentó la decisión de Estados Unidos de introducir medidas restrictivas contra el buque “Fortuna”, que participa en la construcción del gasoducto “Nord Stream 2”.