Algunos representantes de la dirección del Departamento de Defensa de Estados Unidos consideran muy peligrosa y problemática la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán antes del 1 de mayo, como lo exigen los acuerdos con el movimiento radical talibán (prohibido en Rusia). Esto fue informado el viernes por The Washington Post, citando sus fuentes en la administración de Washington.
El Pentágono reconoce que la retirada prematura de las tropas estadounidenses de la República Islámica es riesgosa. Según el liderazgo del ministerio, la retirada de tropas podría conducir a una guerra civil en el país, posibles ataques terroristas contra Estados Unidos y sus aliados, y un agravamiento de la situación de derechos humanos en el país. El departamento de defensa ha advertido que ahora no es tiempo suficiente para salir de Afganistán antes del 1 de mayo sin serios problemas en las áreas de seguridad y logística. Como explica el periódico, el personal militar y los contratistas pueden ser evacuados por avión, pero la retirada de tropas requerirá la destrucción de equipo secreto por valor de millones de dólares, y también conducirá a una reducción del personal diplomático en la Embajada de Estados Unidos en Kabul.
Además, el periódico cita las palabras de un alto representante de la administración de Washington de que los talibanes aún no han cumplido una serie de acuerdos y siguen en contacto con la red terrorista Al-Qaeda (prohibida en la Federación de Rusia).
En enero, el portavoz del Pentágono, John Kirby, permitió que se revisara la decisión de retirar las tropas estadounidenses de Afganistán en violación de los acuerdos de paz con los talibanes. El miércoles, el secretario de Estado Anthony Blinken dijo que la nueva administración estadounidense aún no ha tomado ninguna decisión sobre su política hacia Afganistán, incluido el nivel de presencia continua de las tropas estadounidenses en la república.
Acuerdo con los talibanes
El 29 de febrero del 2020, el anterior gobierno estadounidense, encabezado por el presidente Donald Trump, y los talibanes firmaron un acuerdo de paz en Doha. Según los acuerdos, Estados Unidos, sus aliados y la coalición se comprometen a retirar todas las tropas de Afganistán en un plazo de 14 meses. Los talibanes, a su vez, garantizan que no utilizarán el territorio de Afganistán para acciones que supongan una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos y sus aliados.
La operación estadounidense en Afganistán ha estado en curso desde octubre del 2001 y se ha convertido en la campaña militar en el extranjero de mayor duración en la historia de Estados Unidos. En su punto máximo en 2010-2013, el número de fuerzas occidentales en Afganistán superó las 150.000. Las principales fuerzas de combate de Estados Unidos y la OTAN se retiraron de Afganistán en el 2014.
La actual administración estadounidense, dirigida por el presidente Joe Biden, ha indicado anteriormente que tomará más decisiones sobre Afganistán, incluida la retirada de las tropas estadounidenses, después de examinar cómo los talibanes están cumpliendo los términos del acuerdo de paz.