Varios miles de residentes de Honduras tienen la intención de armar una «megacaravana» para un viaje a Estados Unidos a fines de marzo de 2021. Así lo informó la edición del Departamento19 citando al representante de la Comisión Menonita para la Esfera Social (CASM), César Ramos.
Ramos dijo a los periodistas que otra ola de refugiados planea dirigirse hacia la frontera de Estados Unidos entre el 20 y el 31 de marzo. También advirtió que la nueva caravana puede ser más grande que la anterior, que partió de Honduras el 15 de enero y ascendió a ocho mil. La siguiente corriente estará compuesta principalmente por mujeres y jóvenes que huyen de la violencia y el desempleo.
“La inseguridad en el país y la necesidad de reunificación familiar, así como la flexibilidad en temas migratorios por parte del presidente de Estados Unidos, crea un cuadro que obligará a muchos migrantes que ya han viajado a hacerlo nuevamente”, concluyó Ramos.
«Asalto» la frontera de Guatemala
Una caravana anterior de migrantes, que salió de Honduras hacia Estados Unidos el 15 de enero, derribó los cordones policiales en la frontera con Guatemala.
La policía guatemalteca logró extraditar a 992 inmigrantes ilegales a Honduras, incluidos 163 niños; esto es solo una pequeña parte de las 8.000 personas que se dirigían a Estados Unidos. Posteriormente, los migrantes fueron dispersados por las fuerzas del orden mexicanas en cooperación con Estados Unidos.
Situación general de la migración en Honduras
Honduras es considerada uno de los países más pobres de América Latina y tiene una tasa de criminalidad muy alta. La difícil situación económica se ha visto agravada en gran medida por la pandemia. Según el Consejo de la Empresa Privada (COHEP), unas 600.000 personas han estado desempleadas durante los últimos tres meses. En noviembre del 2020, ocurrieron en el país los huracanes «Eta» e «Iota», que destruyeron parte de la infraestructura de Honduras.
Estos factores han llevado a una situación en la que miles de hondureños se ven obligados a viajar a otros países, principalmente a Estados Unidos en busca de una vida mejor. El nuevo presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, prometió cambiar fundamentalmente la situación en la frontera con México, derogar las estrictas leyes contra la inmigración introducidas por Donald Trump y otorgar a los migrantes centroamericanos el derecho a obtener la ciudadanía estadounidense. Hasta ahora, sin embargo, la situación no ha cambiado: la retórica humanista no impidió que Estados Unidos tomara todas las medidas para dispersar la caravana anterior de migrantes de Honduras.