Cientos de manifestantes tomaron las calles de Ereván para exigir la renuncia del asediado primer ministro armenio Nikol Pashinyan y el restablecimiento del control sobre la disputada Nagorno-Karabaj en una marcha con antorchas.
Los nacionalistas salieron a las calles de la capital armenia el domingo, marchando con antorchas encendidas y banderas armenias al son de melodías populares que sonaban desde un automóvil. Cuando la música se detuvo, los manifestantes corearon «Armenia libre e independiente» y «Retoma Nagorno-Karabaj», entre otros lemas. Los manifestantes también han pedido repetidamente la dimisión de Pashinyan.
La enérgica procesión, encabezada por los partidarios del partido de derecha Sasna Tsrer, coincidió con un concierto, organizado por una parte más moderada de la oposición, que también quiere que Pashinyan se vaya.
Pashinyan ha estado en problemas desde noviembre, cuando firmó un impopular acuerdo de alto el fuego con Azerbaiyán, en virtud del cual gran parte de la región en disputa pasó al control azerí. El primer ministro fue calificado de «traidor» por los opositores políticos por firmar el acuerdo negociado por Rusia. Más tarde, Pashinyan insistió en que fue el ejército el que le imploró que firmara el trato, citando recursos agotados y falta de reemplazos. El primer ministro defendió el acuerdo, argumentando que salvó a las tropas de etnia armenia de un «colapso» completo.
La llamada se produjo después de que el primer ministro despidiera al subjefe del Estado Mayor, Tigran Khachatryan, quien ridiculizó públicamente sus afirmaciones de que los misiles Iskander de fabricación rusa en servicio con las fuerzas armadas armenias tuvieron un rendimiento inferior durante el conflicto con Azerbaiyán. Moscú insiste en que el hardware de última generación no se había utilizado en absoluto en Nagorno-Karabaj.
Pashinyan luego intentó despedir al jefe del Estado Mayor, Onik Gasparyan, pero la moción fue bloqueada por el presidente armenio Sarkissian por inconstitucional el sábado.
Miles de partidarios de la oposición han estado protestando en Ereván esta semana, levantando barricadas y estableciendo un campamento en el centro de la capital. Dicen que permanecerán en las calles hasta la renuncia de Pashinyan, con más manifestaciones programadas para el lunes.