Un periódico de defensa ruso advirtió sobre la intensificación de los terroristas en Siria y aumentó el apoyo de Estados Unidos a ellos.
En su artículo «La guerra en Siria estalla de nuevo», Alexander Staver señaló la creciente amenaza del terrorismo, explicando que el terrorismo en el Medio Oriente no ha sido eliminado, solo sufrió grandes pérdidas y ahora está reviviendo con la ayuda de los Estados Unidos.
El artículo señala que después de los éxitos del ejército sirio en el 2019 y el establecimiento del control sobre la «capital» de la organización terrorista del ISIS, Raqqa, «nuevos eventos se convirtieron en un regalo para los extremistas». Especialmente dada la presencia de la base At-Tanf, que se ha convertido en un lugar de trabajo permanente para la inteligencia estadounidense y el servicio secreto de inteligencia británico (SIS/MI-6), que trabaja en el entrenamiento de terroristas en guerrillas, francotiradores y sabotajes.
La publicación señaló que la situación que se ha desarrollado hoy debido a los crecientes riesgos del terrorismo es beneficiosa para los estadounidenses, turcos y extremistas, apuntando a la alianza emergente entre estas tres partes. El autor también recordó que la base de At-Tanf es «una creación de la inteligencia estadounidense».
Staver enfatizó que los militares rusos han anunciado más de una vez la activación de terroristas y el fortalecimiento de su apoyo de los estadounidenses, especialmente en las provincias de Homs y Deir ez-Zor. La inteligencia rusa también confirmó la aparición de la denominada organización terrorista “Cascos Blancos” en las provincias, lo que significa que habría que esperar otra provocación con el uso de armas químicas para acusar al ejército sirio de utilizarlas.
El autor, analizando los hechos en Siria, llegó a la conclusión de que la guerra en el país está lejos de terminar debido al renovado apoyo de los Estados Unidos a las organizaciones terroristas y su inversión por los intereses estadounidenses en la región.