Rusia está lista para unir fuerzas con los pueblos de Europa, pero no se olvidará de las páginas negras de la historia, incluidas las asociadas con el genocidio contra el Pueblo Soviético, dijo el presidente ruso, Vladimir Putin.
En una reunión con los líderes de las facciones de la Duma Estatal el miércoles, abordó el tema de la memoria histórica. El Mandatario afirmó que el país debe avanzar y pensar en el futuro, consolidando sus esfuerzos con otros estados y pueblos, «a pesar de las dificultades y condiciones actuales». El pasado, según Putin, no debería ser de «retroceder», pero es importante recordarlo.
“Ahora [nosotros] estamos prestando atención a los crímenes que se cometieron contra la población civil [durante la Gran Guerra Patria (1941-1945)]. Esto es un genocidio, esto es algo absolutamente obvio, y creo que lo estamos haciendo bien (estamos investigando estos hechos)”, señaló el líder ruso.
Putin enfatizó que esto permite «con los ojos abiertos mirar los eventos de hoy y construir» la política de la Federación de Rusia de tal manera que «nada como esto volverá a suceder en el futuro».
El jefe de Estado también agregó que la Federación de Rusia siempre ha apreciado y apreciará el recuerdo de la Victoria, que los antepasados ganaron con su «sangre», asegurando el futuro.
Putin ha destacado repetidamente la importancia de recordar la guerra y la inadmisibilidad de reescribir su historia. En enero, anunció que la Duma del Estado debería aprobar la prohibición de equiparar públicamente el papel de la Unión Soviética con las actividades de la Alemania nazi.