Irán reanudó el enriquecimiento de uranio de alto grado más de un año después de que el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se retirara del acuerdo de energía nuclear firmado en 2015.
Saeed Khatibzadeh, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, dijo que Teherán está preparado para reducir aún más los compromisos bajo el acuerdo nuclear de 2015 si otras partes no cumplen con sus obligaciones.
«No tenemos otra opción que respetar la ley. No significa poner fin a todas las inspecciones del organismo de control nuclear de la ONU», dijo Khatibzadeh, refiriéndose a una ley iraní que obliga al gobierno a endurecer su postura nuclear.
Cuando se le preguntó acerca de los comentarios del ministro de inteligencia de Irán la semana pasada de que la presión occidental persistente podría empujar a Teherán a buscar armas nucleares, Khatibzadeh dijo que «Irán no ha buscado y nunca buscará armas nucleares».
El ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se retiró del acuerdo del Plan de Acción Integral Conjunto en mayo de 2018 y volvió a imponer sanciones a Irán. El acuerdo nuclear reconoció el derecho de Irán al uso pacífico de la energía nuclear, a cambio de promesas de no desarrollar armas nucleares, respaldado por un régimen de inspecciones de la ONU, y a cambio, Estados Unidos y las naciones del E3 acordaron retirar las sanciones a las exportaciones de petróleo iraní.
La nueva administración de Estados Unidos exigió a Teherán que dejara de enriquecer uranio y volviera al cumplimiento total antes de que siquiera discutiera el siguiente pleito al levantar las sanciones.
En noviembre, el parlamento iraní aprobó una ley que obliga al gobierno a detener las inspecciones de la AIEA de sus sitios nucleares y aumentar el enriquecimiento de uranio más allá del límite establecido en el acuerdo nuclear si no se alivian las sanciones.